La transición energética ya no es cosa del futuro: es una realidad al alcance de muchas personas. Cada vez más hogares y empresas apuestan por fuentes limpias como la solar o la eólica, motivados por el ahorro económico, el respeto al medio ambiente y la autonomía energética. Pero antes de lanzarse a instalar placas solares o aerogeneradores, conviene tener en cuenta algunos factores importantes.
Aquí te dejamos 7 consejos clave para iniciarte en el mundo de las energías renovables con buen pie:
1. Evalúa tu consumo energético real
Antes de cualquier instalación, es esencial conocer cuánta energía consumes y en qué momentos del día. Esto te ayudará a dimensionar correctamente el sistema, optimizar la inversión y evitar sobrecostes innecesarios.
2. Aprovecha las ayudas y subvenciones
Muchos gobiernos, tanto locales como nacionales, ofrecen incentivos para fomentar el uso de renovables. Infórmate sobre deducciones fiscales, subvenciones para la instalación o bonificaciones del IBI. Pueden marcar una gran diferencia en la rentabilidad del proyecto.
3. Compara presupuestos y empresas instaladoras
Solicita varios presupuestos y no te quedes solo con el más barato. Asegúrate de que la empresa instaladora esté acreditada, tenga experiencia y ofrezca garantías claras. Lee reseñas y, si puedes, visita alguna instalación realizada por ellos.
4. Considera el almacenamiento con baterías
Si bien no siempre es necesario, instalar baterías te permite almacenar el excedente de energía que generas durante el día y usarlo cuando más lo necesitas (como por la noche). Es una buena opción si buscas mayor independencia de la red.
5. Ten en cuenta la orientación y el espacio disponible
Para instalaciones solares, la orientación sur y una buena inclinación son ideales. También es clave que el tejado o el terreno no tengan sombras durante muchas horas al día. Un estudio previo del lugar es fundamental.
6. Piensa a largo plazo
La inversión inicial puede parecer elevada, pero las renovables tienen un retorno asegurado con el tiempo. Las placas solares, por ejemplo, duran más de 25 años y requieren muy poco mantenimiento. Calcula tu ahorro a 10 o 20 años vista, no solo el gasto inicial.
7. No todo es instalar: también es ahorrar
Complementar una instalación renovable con hábitos de eficiencia energética multiplica los beneficios. Utilizar electrodomésticos eficientes, cambiar a iluminación LED o programar consumos en horas solares hará que tu sistema rinda aún mejor.
Conclusión
Pasarse a las energías renovables es una decisión inteligente, pero como toda inversión, requiere planificación. Con estos consejos, estarás mejor preparado para elegir la opción que más se adapte a ti y dar un paso firme hacia un modelo energético más sostenible y rentable.
